Carlos Hernández, corresponsal GN
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San Carlos, Alajuela.- El cambio, de un momento a otro, fue sorpresivo y radical.
La cálida y apacible mañana, como transcurrían ayer las primeras horas en Ciudad Quesada, varió en cuestión de instantes a los daños y el miedo.
Un grupo de jóvenes, integrado por al menos cuatro adictos, sorpresivamente apareció por el centro de la zona comercial abordando a los peatones, lanzando insultos, quebrando ventanales y envases de vidrio.
Los peatones y los comerciantes afectados, se presentaban como víctimas impotentes a frenar esa ola de vandalismo.
Unos patentados llamaron a la Fuerza Pública que envió a cinco efectivos a quienes se les hizo imposible detenerlos por lo que, conforme pasaban los minutos, aumentaba el miedo entre la gente y los daños a los comercios.
A la zona fueron enviados más policías de apoyo como también oficiales del OIJ.
Sin embargo, no fue sino hasta que las autoridades se emplearon a fondo que la normalidad regresó a la zona. Al final, solo dos de los sospechosos fueron detenidos.
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