Carlos Láscarez S.
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Goicoechea.- En una emotiva ceremonia, dieron ayer el último adiós a la profesora de pintura Kattia María Umaña Chaverri, de 35 años, quien murió ahogada luego de salvar a su hija y a una sobrina que corrían peligro.

Más de 100 personas llegaron hasta el cementerio Nuestra Señora de Guadalupe a despedirla. Allí la esperaba un mariachi que entonó La Barca, Amor Eterno y Mujeres Divinas entre otras.

Su madre María Marlene Chaverri agradeció encima del féretro los años que la tuvo, al tiempo en que prometía que va a trabajar para que sus nietas se conviertan en unas profesionales.

Por ratos se preguntaba si era una broma lo que pasaba, ya que no asimilaba el ver a su hija allí.

“Ella murió salvando a sus hijas. Antes de morir una vez dijo que le llevaran mariachis y así lo hice. De sus hijas voy a hacer unas profesionales para que ella se sienta orgullosa desde el cielo. Compartíamos juntas todo”, comentó Chaverri minutos antes de que Kattia fuera sepultada.

Agregó que lo último que su hija le comentó fue que le dejaba a sus hijas, ya que ella de alguna forma sabía que se iba a morir.

Tras las fiestas de diciembre en familia, la víctima le comentó a una tía que vino al país desde EE. UU. que era la última vez que todos estaban juntos, como pasó.