Domingo 10 de julio de 2011, San José, Costa Rica

Cantante

Elena Umaña

Por Rodolfo Rodríguez

rodolfo.rodriguez@aldia.co.cr

La vida de Elena Umaña es otra. Tanto en el escenario como fuera de él, la guapa cantante considera que ahora es una mujer plena y nueva.

Hablar de ella trasciende lo musical. En su momento considerada como “La Selena Tica”, hoy luce más sexy que tiempo atrás y luego de varios años separada de su exesposo Henry Moya, la morena vive cada día intensamente junto a su hija Natasha de siete años y su perrita “Lulú”, una pequeñita oso maltés.

Aunque ya no elabora su propia ropa, la porteña sigue haciendo sus diseños, pero mejor la paga a hacer, ya que le consume mucho tiempo.

Su rutina diaria comienza a las 5:30 a.m. cuando alista a su hija para la escuela y luego de retomar de nuevo el sueño prepara las tenis, paño y agua para hacer su rutina de ejercicios de lunes a viernes en el gimnasio.

“Pasé una etapa aislándome de la gente para que no me vieran a los ojos y no sintieran lo que estaba viviendo, pero ahora me siento muy libre, gozando la vida, disfrutándome yo, estoy en un momento muy feliz de mi vida”, dijo.

Elena aseguró no tenerle miedo a la soledad, no obstante agregó que, “no es bonita, ya son años de estar sola y ya cansa, ya hace falta”, citó la cantante afirmando que las puertas del amor no están del todo cerradas, pero a pesar de los pretendientes no se apresura y dice que “el amor llegará en su momento”.

Su vida ahora es independiente, pero ha demostrado ser una mujer fuerte, de armas tomar, que a pesar de todo ha salido adelante. Pero por dentro, se define como una mujer sensible, sentimental y a la que hieren muy fácilmente.

Ahora sale de vez en cuando con sus amigas, socializa más, aunque le gusta estar mucho en la casa viendo televisión.

Su dinero lo invierte más en zapatos y ropa, aunque también guarda su buena parte para alguna emergencia y más adelante planea abrir un negocio personal de venta de ropa femenina.

Para ella, verse espectacular como luce siempre lo deja para los escenarios o eventos, ya que normalmente le gusta pasar inadvertida y prefiere no llamar mucho la atención.

Momento mágico

Muchos fueron los sacrificios a los que Elena se sometió por su carrera artística, pero como nunca es tarde para retomar, el pasado Día Internacional de la Música (21 de junio) vivió uno de sus mejores momentos en esta nueva etapa para ella.

“Fui invitada a cantarle a los niños de la escuela de mi hija. Fue un sentimiento tan bonito porque nunca lo había hecho, al cantar y verle la cara de felicidad, alegría, orgullo y emoción a ella y a todos los compañeritos fue una experiencia única”, recordó Umaña con sus ojos brillantes.

Y la música

El proyecto actual de Elena en el plano musical es grabar un nuevo disco con canciones escritas por ella, con mucha música romántica e inspiradas en historias personales y otras que también le cuentan.

“A mí me gusta, siempre soñé con cantar baladas y eso es lo que estoy grabando ahorita. Ya tengo listo el primer sencillo. A lo mejor pueda incluir una o dos canciones del genero ya conocido”, mencionó.

Su talento es hereditario pues creció bajo un techo lleno de músicos, entre cantantes y guitarristas. Desde que recuerda, siempre soñó con ser cantante.

Las extravagancias no van con ella. Por ejemplo en camerinos cuando le ofrecen, Elena nada más pide mucha agua.

Entre sus recuerdos más gratos, nunca olvidará el día en que escuchó por primera vez su tema “Te amaré” en la radio.

Más guapa que nunca, Elena espera volver pronto como aquella cantante que hacía bailar, cantar y suspirar a muchos costarricenses.