Soy un educador de 32 años. Mi mejor amiga se enojó conmigo, porque le dije “gorda”, y siempre me acusan de no tener tacto, pero yo digo que soy muy sincero. ¿Ahora qué hago?
Pedir humildemente perdón, haga énfasis en que a usted le preocupa mucho su salud, y no sabía cómo ayudarle en sus problemas, y comprométase a tratar de ser más sútil, pero siempre sincero. A lo que me refiero es que el tono de voz, las palabras y la forma de redactar nuestras ideas a nivel mental, puede hacer que fracasemos o logremos éxito comunicándonos con otros, y no sea catalogado como “concho o cruel”. Para una interacción eficaz, primero sea coherente entre lo que piensa y dice. Luego de que ya haya identificado la idea, piense en una sola frase, corta, concisa y segura. Ahora “redáctela en su mente en una forma positiva, no negativa, por ejemplo: “no comas pastel” (es negativo), “come papaya y fresas, son dulces y te ayudan” (dan opciones y es positivo). También puede preparar a su receptor, aclarando que lo que va a decir es porque la ama, y luego señalar primero aspectos buenos, y al final los negativos con posibles soluciones. No dude en halagar y felicitar sinceramente a otros.
MARIDO EN CONTRA
Yo tenía un buen empleo, pero me despidieron. Ahora mi esposo me achaca la mala situación económica en que estamos y no quiere aportar más.
Cualquier motivo que haya sido su despido, él no debe juzgarla, pues no los conduce a nada. Mejor haga una lista de todos los errores y qué puede hacer para remediarlos, los que se puedan y afrontar las consecuencias de ellos, y así aprenden ambos. Por otra parte, pienso que él no está sabiendo manejar la frustración e inseguridad económica que ahora enfrenta, por eso hace “berrinches” dañinos que afectan su autoestima y la confianza hacia él. Mejor hagan las paces y un compromiso de paz..
