Vivir Hoy
Viernes 20 de abril de 2012, Costa Rica

Estreche lazos entre mascota y dueño

Ladridos antiestrés

Neyssa Calvo Achoy

ncalvo@aldia.co.cr

El mismo efecto que tiene en las personas la yoga, lo tiene en los perros logrando que sus días sean más relajados.

Se trata de un método de armonización canina conocido como doga, un nombre que nace de la combinación de la palabra dog (traducción de perro en inglés) y yoga, según el sitio froggerenelmundo.blogspot.com.

“La energía positiva que el yoga logra en la gente también se transmite a los animales con posturas específicas para ellos de acuerdo a su tamaño y peso”, destacó Marcela Castro Wedel, terapeuta física e instructora de doga en el país.

Son muchos los beneficios que se logran además de la relajación combinando las posturas del yoga para todos los participantes.

“Lo ideal es que la persona lo practique con su propio perro para estrechar los lazos entre ambos”, añadió.

El doga que nació en Inglaterra está causando furor en Estados Unidos, según el sitio froggerenelmundo.blogspot.com.

El objetivo del ejercicio es darle al perro un descanso donde incluso pueda controlar su comportamiento agresivo y hasta vencer sus propios temores.

Según Castro algunos animales llegan a las sesiones y les resulta muy incómodo que sus dueños los levanten durante el ejercicio porque tienen miedo a las alturas. Sin embargo, poco a poco se van acostumbrando y permitiendo mayor cercanía.

Las lecciones son usualmente dirigidas por un instructor que empieza con una serie de estiramientos y masajes que ayudarán al animal a mejorar su condición y desarrollo físico.

“Algunos llegan con contractruras en la columna y al igual que con el ser humano se alivian luego de una sesión. De igual manera se controla mucho su agresividad”, destacó Castro.

La estadounidense Suzi Teitelman, instructora de doga en Estados Unidos, aseguró que los animales trabajan su cuerpo mediante este método para mejorar la salud cardíaca, la digestión y el estado de ánimo.

Sáquele jugo

Mejora la confianza del perro y su dueño.

Ayuda a tonificar músculos, aún más si se le añade el peso de la mascota sobre el cuerpo al levantarlo.

Si las clases son grupales los animales tienen la posibilidad de socializar.

Aumenta la flexibilidad y favorece la respiración.

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