Sucesos
Domingo 1 de julio de 2012, Costa Rica

Nicaragüenses murieron atropellados en Limonal de Abangares

Mueren 4 en trágico accidente

Hugo Solano y Julio Segura, corresponsal GN

hsolano@aldia.co.cr

Los cuatro se levantaron con el ánimo de quien va a ver a su familia en Nicaragua y a dejarle un dinerito, como solían hacerlo. Habían llegado al país hace más de un año. Trabajaban en construcción. Todos murieron.

Atrás quedaron los sueños de Álvaro Hurtado Peña, Guadalupe Antonio Mendoza, Carlos José Zamora y Silvio Cano Díaz, este último falleció en el hospital Monseñor Sanabria, de Puntarenas. El OIJ calculó en 35 años el promedio de edad de los cuatro.

Con las primeras claras del sol, que en estos días de solsticio, aparecen más temprano, los cuatro albañiles alistaron sus bultos y se enrumbaron a la parada de buses que está sobre la Interamericana, tres kilómetros al norte del cruce de Limonal de Abangares.

Apenas habían caminado unos 300 metros por la orilla derecha de la calzada, que no tiene aceras, cuando un Suzuki Grand Vitara, los arrolló.

El carro fue a estrellarse contra la parada de buses cercana y atrás quedaron, esparcidos, los cuerpos de los trabajadores que caminaban en fila india en el mismo sentido del vehículo.

Zapatos y bolsos quedaron desperdigados. El accidente fue en una recta. La vía estaba seca.

Cuando cruzrojistas locales llegaron a la escena, alertados popor una llamada del 911, que ingresó a las 5:20 a.m., no había nada que hacer por tres de ellos.

El único que tenía tenues signos de vida era Silvio Cano, pero los golpes cobraron su vida, minutos después de ingresar al hospital de Puntarenas, informó Carlos Arias, cruzrojista.

Álvaro Bravo, tráfico que atendió, dijo que presumiblemente el sueño dominó al chofer, quien tenía todos los documentos al día.

Dos ambulancias atendieron el accidente suscitado en Barrio Jesús, de Las Juntas. Una salió con el herido grave y otra con el chofer involucrado, de apellido Zúñiga, de 25 años.

Francisco Dávila, cuñado del fallecido Álvaro Hurtado, dijo que era de Managua, donde dejó compañera y tres niños.

Hurtado tenía 37 años. El último trabajo que hizo con los otros fallecidos fue un muro alrededor de una torre del ICE.

Dávila recordó que el viernes recibieron el pago de la quincena. La noche previa al accidente la cuadrilla de 10 peones de construcción se reunió en la casa que el patrón les alquila a un kilómetro del río Desjarretado.

“Hablaban del anhelo por ver los niños”.

Otros de los fallecidos son de Matagalpa y de Diriamba.

Estudiante de Farmacia

Al conductor del Suzuki, los oficiales de Tránsito no le pudieron hacer la alcoholemia debido a los golpes que presentaba en la boca y rostro en general. La prueba se le hizo vía sanguínea en el centro médico de Cañas. Se trata de un estudiante de Farmacia de la UIA e iba con un compañero de apellido Torres, que iba dormido al momento del accidente y está fuera de peligro.

El papá del chofer relató que su hijo terminó antenoche un examen a las 9 p.m. en la universidad, por lo que le recomendó que no viajara, pero ayer salió muy temprano para visitar a su madre en Liberia. Lamentó lo ocurrido.