Nacionales
Domingo 24 de junio de 2012, Costa Rica

Domingo 24 de junio de 2012

El evangelio de hoy

Álvaro Sáenz Zúñiga, presbítero

asaenz@liturgo.org.

Hoy domingo la liturgia celebra el nacimiento de Juan Bautista. Solo de tres personas celebramos su nacimiento: el de Jesús, por supuesto, el de su Madre y el de Juan el Bautista.

Los acontecimientos que rodean el nacimiento del Bautista son misteriosos y dignos de ser conocidos y festejados: es hijo de dos miembros de la familia sacerdotal de Leví, Zacarías e Isabel. Ambos son entrados en años y son estériles, cosa no bien vista por la gente que creía erróneamente que Dios castigaba así a los pecadores. Dios interviene para que, a edad avanzada, ellos logren su proyecto de tener un niño. Así Dios haría venir al mundo al que necesitaba para dar continuidad al proyecto mesiánico al tiempo que destruía argumentos tan equivocados de la gente. El niño, cuyo nacimiento sería festejado por muchos, precedería al Señor, es decir, vendría para prepararle el camino al Mesías, “con el espíritu y el poder de Elías, para reconciliar a los padres con sus hijos y atraer a los rebeldes a la sabiduría de los justos, preparando así al Señor un Pueblo bien dispuesto”.

Es Dios quien dispone el nacimiento del pequeño, Dios quien le da la misión, incluso Dios le dará nombre al que nacería. Así lo asumiría desde el seno materno para ejercer, ya no el sacerdocio del templo, ya superado, sino para establecer un bautismo de conversión para el perdón de los pecados. Por ello viviría en condiciones muy singulares, dando gloria a su Creador y llevando adelante todo el proyecto de salvación preparado desde antiguo.

Juan venía a preparar el camino al Señor y lo hizo precedió incluso en la muerte, al defender la verdad y señalar el error y el pecado. El nacimiento de Juan llena de alegría a la Iglesia entera. De su vida de entrega y sacrificio debemos participar para aprender a preparar el camino al Señor en los corazones de sus fieles. El Señor debe llegar a los demás. Preparémosle el camino.