Redacción - Ariel es un labrador juguetón, pero no sabe controlar sus impulsos.
Según cuenta Joseph Rojas es parte de la familia desde los dos meses de edad, ya tiene año y 10 meses, y pesa 30 kilos. Sin embargo, cada vez que alguien llega al patio de la casa, donde permanece, se le tira encima para jugar con fuerza.
Además, es de los que en el parque se vuelve loco y no hace más que correr.