Tras conocer que no se aplicará pena de muerte

BOGOTA/AP.- Colombia reanudó el martes la expulsión hacia Guatemala de Alejandro Jiménez alias “El Palidejo”, costarricense sospechoso de ordenar el atentado en el que murió Facundo Cabral, luego de que el proceso fuera suspendido debido a que Costa Rica requirió un compromiso de que el detenido no recibirá en Guatemala una sentencia a muerte.

El ministro guatemalteco de Gobernación, Mauricio López Bonilla, aseguró a The Associated Press que Guatemala sí envió una carta a Costa Rica por vía diplomática dándole garantías de que no se le aplicará la pena de muerte.

Poco antes el vocero de la misma cartera, Willy Melgar, había explicado que el traslado de Jiménez, había sido interrumpido a causa de una protesta diplomática de Costa Rica provocada por la existencia dentro de las leyes de Guatemala la que castiga con pena de muerte algunos casos de asesinatos y secuestros.

Una funcionaria de la cancillería colombiana, quien dijo no estar autorizada para dar declaraciones a la prensa, confirmó a la AP que la aeronave finalmente partió desde la base antinarcóticos en Bogotá porque ya tenían en su poder la certificación guatemalteca sobre la no aplicación de la pena de muerte a Jiménez González.

El fiscal general de Costa Rica, Jorge Chavarría, confirmó que su país requirió que se formalizara un compromiso del gobierno de Guatemala de que en el caso de Jiménez se respetará su vida e integridad. Horas antes sostuvo que honrarían un acuerdo que permitiría el traslado del detenido a Guatemala, por las graves acusaciones que enfrenta ante la justicia de esa jurisdicción.

Jiménez era buscado internacionalmente por la justicia de Guatemala por su presunta implicación en el asesinato del músico argentino, y Costa Rica lo requiere también por delitos de blanqueo de capitales y narcotráfico.

En Guatemala hace muchos años estamos con una moratoria por la pena de muerte a través de una sentencia de una Corte Interamericana (de Derechos Humanos) por lo que hace por lo menos una década no se aplica la pena letal, explicó López Bonilla.

Anteriormente, un vacÍo jurÍdico respecto la aplicación o no del indulto presidencial ha impedido que durante los últimos dos mandatos haya sido aplicada a ninguno de los reos que recibieron esa sentencia.

El director de la policÍa colombiana, general Oscar Naranjo, declaró temprano a reporteros que Jiménez, de 38 años, era uno de los proveedores de carteles mexicanos, concretamente del cartel de Sinaloa, para El Chapo Guzmán.

Un comunicado de la policÍa colombiana señaló que información de los organismos de seguridad costarricenses muestra que el individuo conocido como Palidejo serÍa enlace entre el Cartel de Sinaloa que encabeza (JoaquÍn) El Chapo Guzmán y la organización de los hermanos Comba, dos colombianos considerados entre los narcos más buscados de su paÍs y quienes habrÍan facilitado la llegada del costarricense.

Las autoridades no profundizaron sobre los detalles de la relación de Jiménez con el capo mexicano, uno de los más notables prófugos del mundo y considerado por una publicación entre los personajes más ricos del planeta.

Naranjo reveló que los hermanos Luis Enrique y Javier Antonio Calle Serna, Los Comba o Combatientes, que fueron parte del extinto cartel del Norte del Valle, facilitaron la huida de Jiménez, quien se encontraba bajo constante persecución de las autoridades en Centroamérica y por ello aparentemente tenÍa la intención de esconderse en algún paÍs del sur del continente.

Cabral, de 74 años, murió tiroteado el 9 de julio de 2011 en Guatemala cuando se desplazaba al aeropuerto La Aurora en compañÍa del empresario nicarag ense Henry Fariñas en una camioneta y quien habrÍa sido el objeto principal del atentado.

El empresario sobrevivió.

Naranjo narró que la policÍa antinarcóticos colombiana supo el viernes en la noche que una lancha rápida habÍa salido de Panamá con rumbo a Colombia y entonces alertaron a la Armada, que ubicó en la madrugada del sábado la embarcación en una zona del departamento de Chocó, en la costa del PacÍfico colombiano, a unos 400 kilómetros al norte de Bogotá.

En la lancha iban dos colombianos y un tercer hombre que se identificó como Carlos Emilio Cardona MarÍn, pero al notar que su acento era distinto, los agentes de la policÍa y la Armada comenzaron a interrogarlo y determinaron que era un ciudadano natural de Costa Rica, dijo el jefe policial.

De inmediato se envió la foto y las huellas del detenido a Costa Rica y la noche del lunes se determinó que se trata de Jiménez González, dijo Naranjo.

La policÍa colombiana explicó en su comunicado que al parecer, Jiménez González mandó a matar a su antiguo amigo Henry Fariñas (investigado por narcotráfico y lavado de activos), debido a problemas de dinero. Circunstancialmente, cuando pistoleros a sueldo perpetraron el ataque, Fariñas iba acompañado del famoso músico argentino. Las autoridades de Guatemala tienen detenidos a cuatro autores materiales del atentado.

Según López Bonilla, Jiménez se encontraba en Guatemala cuando sucedió el crimen y, junto a otros sospechosos, fue captado por cámaras de seguridad en el hotel donde se hospedaba Cabral.