Goicoechea. - Salir en defensa de un proveedor al que asaltaban le costó la vida ayer al dueño de una panadería, quien falleció luego de recibir tres balazos desde corta distancia, confirmaron la Fuerza Pública y un testigo.
El homicidio ocurrió a las 10:05 a.m. fuera de la panadería Tutú, en Calle Blancos. No había clientes en el negocio.
La víctima se llamaba Rafael Camacho Castillo, de 48 años. Tenía casi dos años de tener el negocio, comentaron varios vecinos. Recibió los balazos en la cabeza, tórax y un brazo. Cuando la Cruz Roja llegó, ya estaba muerto.
Según versión del proveedor asaltado –cuya identidad se mantiene en reserva– Camacho salió de la panadiería y tomó al delincuente por el cuello.
Forcejearon, con tan mala suerte que se resbaló en un pequeño muro, lo que aprovechó el homicida para dispararle.
“’Rafa’ dio unos pasos y cayó muerto dentro del local. El tipo, de unos 21 años y vestido de negro, me pidió las llaves del carro y me quitó la billetera y documentos. Andaba un revólver calibre 38 y disparó sies veces”, dijo el proveedor. La vecina Iris López recordó al comerciante como una persona colaboradora, chistosa y quien siempre estaba en su negocio.
Barrio consternado
Jorge Rodríguez,
Fuerza Pública.
“Primero le robó al fallecido. Luego forcejearon y le disparó. Huyó en un carro blanco”.
Héctor Blanco,
Paramédico de Cruz Roja.
“La víctima presentaba dos balazos en el tórax y uno en la cabeza. Ya no presentaba ningún signo de vida”.
