Franklin Arroyo González
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La muerte de William Fernández, el 24 de julio en la autopista General Cañas, se debió a que la valla de contención no cumplió su función de contener, redireccionar y estabilizar los autos.

Así lo aseguró German Valverde, coordinador del Programa de Infraestructura de Transporte, del Laboratorio Nacional de Materiales y Modelos Estructurales (Lanamme) de la Universidad de Costa Rica.

Tampoco existe una señalización clara en la carretera.

El accidente se produjo cuando Josué Madrigal Brenes manejó en contra vía hacia una salida a la pista (sentido Alajuela-San José) unos 200 metros al este de la entrada al hotel San José Palacio.

Esto provocó que un bus golpeara a una buseta, que a su vez se pasó al carril contrario (sentido San José - Alajuela) e impactara el auto donde viajaba Fernández.

“Las barreras no deben permitir que pase el carro, debe devolver el vehículo a la carretera y estabilizarlo (no volcarlo)”, aseguró Valverde.

Al menos las dos primeras funciones fallaron. Tampoco existe una señalización clara, aseguró.

Marvin Jiménez, delegado de Tránsito de San José, reconoció que dicho dispositivo pudo incidir en la fatalidad. “No tengo la justificación técnica, pero si la valla fuera más alta, el resultado pudo ser otro”, comentó.