Madrid / DPA - El “caso Robinho” vivió su enésimo capítulo. Schuster, entrenador del Real Madrid, no convocó al brasileño para el partido de hoy ante el Deportivo de La Coruña y aseguró que el conflicto "no está cerrado".

El asunto ofrece cada día una vuelta de tuerca. La sucesión de acontecimientos esta semana fue la siguiente: el Chelsea hace una oferta, el Real Madrid pide más dinero, el club inglés ofrece algo más, la hipotética nueva camiseta del jugador comienza a venderse entre los hinchas ingleses, la entidad española renuncia a la venta, Robinho insiste en marcharse...

No es fácil seguir los acontecimientos, pero la resolución se acerca a su fin, pues mañana se cierra el plazo de fichajes. Entonces, se sabrá el destino final de Robinho, quien se incorpora ese mismo día a Brasil.

Ayer se habló poco del partido inicial de la Liga española y mucho de Robinho, sin que Schuster ofreciera luz. “Me gustaría que el tema estuviera cerrado, pero no es así. Por eso Robinho no puede ir a La Coruña. Es una decisión mía. Jamás el club me dijo nada en este sentido”, declaró.

Sin embargo, Schuster es optimista con las opciones de quedarse con el jugador, aunque tiene pocos aliados al respecto. “Mi papel es aconsejar, intentar convencerle de que puede estar con nosotros”, afirmó. El alemán está dispuesto a agotar la vía diplomática.

Y otra más de Schuster: “Quiero que Robinho se quede, lo he dicho siempre. Sé lo que es mejor para él”.

Lo que sucede es que Robinho se mantiene firme en su idea de marcharse, por más que en las últimas horas se haya especulado con la posibilidad de que el Real Madrid le obligara a pedir perdón y a vestir la camiseta blanca para toda la temporada.

“Tengo contrato con el Real Madrid, pero como todo el mundo sabe todavía hay negocaciones. Ellos están negociando”.

Schuster volvió a cargar hoy contra Wagner Ribeiro, el representante del futbolista. “Tiene mucha presión desde fuera”.

Lo que sí descartó el técnico alemán es que Robinho se hubiera negado a viajar al campo del Deportivo de La Coruña, un acto de rebeldía que no hubiera permitido. En todo caso, no se pierda mañana el último capítulo.