Hugo Solano
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Un testigo vio al Subaru pasar a toda prisa por el cementerio de San Pedro y, segundos después, escuchó el estruendo.
Niko Cavallini Araya quedó sin vida dentro de las latas retorcidas, ayer a las 4:20 a.m.
El estudiante de Ingeniería Eléctrica, de 24 años, y vecino de Tibás, venía en el sentido Zapote-San José, cuando se estrelló de frente contra la base del puente de la rotonda de la Hispanidad.
Fernando Gómez, socorrista de Montes de Oca, declaró al joven fallecido en el lugar.
A las 6:20 a.m. llegó la familia al lugar y constató que se trataba del joven estudiante.
El Subaru de su madre quedó destrozado y hubo que usar equipo hidráulico para que los oficiales del OIJ pudieran sacar el cuerpo y enviarlo a la morgue.
El tráfico Heriberto Álvarez anotó el exceso de velocidad como causa del accidente, pero no se sabe si hubo alcohol de por medio, si el muchacho se durmió, o si hubo una indecisión en la ruta por seguir camino a Tibás.
El cuerpo fue levantado a las 7:15 a.m. por orden de la jueza María Gabriela Segura.
El chofer tenía licencia B1.
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