Francisco Carballo
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Escazú. Quizás nunca les pasó por sus mentes recibir un trofeo de las propias manos del alemán Michael Schumacher, considerado el mejor piloto de la Fórmula Uno en la historia.
Pero el sueño se les hizo realidad a los campeones nacionales del kartismo, rallismo y automovilismo, ayer en el Hotel Real Intercontinental, en Escazú.
Los más sorprendidos fueron sin duda los kartístas Sebastián Borge, de 7 años, y Diego Monge, de 10, quienes son los monarcas de Commer 50 y Fórmula 160, respectivamente.
“Me preguntó (Schumacher) cuántos años tenía y a la edad que empecé. Estoy muy contento por conocerlo”, dijo Borge.
Igual de alegre estaba Diego Monge, que logró conocer a su ídolo.
“Me sentía un poco asustado, pero fue un gran honor tener a Schumacher al frente”, manifestó Monge.
Otros que tuvieron el gran honor fueron Ernesto Rodríguez, campeón de la GT1, y los hermanos Rebeca y Gerardo Moreno, monarcas del rally.
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