Sao Paulo / DPA.- El fútbol y el Carnaval, las dos pasiones nacionales brasileñas, se fusionaron en la madrugada del domingo en una sofisticada comunión para dar brillo al último día de desfiles de las escuelas de samba, las cuales concursaron en el carnaval de Sao Paulo.

El Sambódromo Anhembi, que es la tradicional pasarela de la samba paulista, se vio honrada con la presencia de jugadores de los clubes más populares de la metrópolis, quienes desfilaron junto con las “escolas”.

La primera agrupación en mezclar fútbol y carnaval fue la Mocidade Alegre, uno de los gremios más destacados del desfile, la cual tuvo como invitado especial al atacante Washington, del Sao Paulo.

Este año las agrupaciones resintieron la crisis porque las dos grandes fuentes de financiamiento para los carnavales se redujeron drásticamente: el patrocinio de corporaciones y los turistas extranjeros que pagan por el privilegio de desfilar con los participantes. Algunas escuelas de samba, redujeron sus producciones.