Ronny Rojas
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La rentabilidad fue uno de los criterios que pesó para cerrar las embajadas costarricenses en Bolivia, República Checa y Paraguay, así como dos consulados más, explicó el canciller Bruno Stagno.

“Las embajadas y consulados que operan de forma autónoma son agentes auxiliares de recaudación de tributos, en virtud de los aranceles consulares que captan. Aquí vimos el monto que recaudan en función de cuánto nos cuestan”, agregó.

Según Stagno, el movimiento diplomático y político, así como el volumen comercial y la cantidad de ticos que residen en esos países y ciudades, también se tomaron en cuenta para decidir la clausura de dichas sedes.

La medida se adoptó para ahorrar dinero, según la Cancillería.

“Eran decisiones necesarias. Pretendemos hacer más con menos recursos”, dijo Stagno.

Desde mayo del 2006, la administración Arias ha clausurado cuatro embajadas más y otros cinco consulados. En su lugar, abrió embajadas en Singapur y China.