Carlos Láscarez S.
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Heredia. - Expertos en patología forense, jueces y fiscales efectuaron ayer una exhumación, que se inició a las 9:30 y culminó a las 11:40 a.m., para determinar si los restos son realmente los del empresario Luis Jorge Sosa Rivera, de 46 años, quien falleció el 5 de octubre del año pasado.

La diligencia, catalogada como poco usual, fue en Jardines del Recuerdo, confirmó Fabián Barrantes, encargado de Prensa de la Corte.

Agregó que la exhumación fue solicitada por el Juzgado Penal de San José, a fin de conocer la causa exacta del deceso.

Sosa, al parecer, murió por complicaciones producidas por una bacteria que contrajo, tras la ingestión de agua contaminada.

Había sido detenido el 3 de noviembre del 2006 en un operativo del OIJ llamado “Cuarto de Milla”, por la afición que uno de los detenidos tenía por los piques entre cabezales. Ese día, las autoridades le decomisaron 21 vehículos de ese tipo, un Toyota Tundra y dos cuadraciclos.

También se le relacionó con liderar una banda que movilizó al menos $4 millones y el fallido envío de al menos 1,5 toneladas de cocaína a Centroamérica. Quedó en libertad con medidas el 4 de mayo del 2006.