Roma / AFP. El estadounidense Michael Phelps, héroe olímpico en 2008, perdió la corona y el récord mundial en los 200 metros libres ante el alemán Paul Biedermann, en una jornada del Mundial de natación en que la italiana Pellegrini brilló de nuevo.
Ayer hubo cuatro récords mundiales, lo que eleva la cuenta a quince en apenas tres días.
En esta ocasión, los autores de las plusmarcas fueron Biedermann (200 m libres, 1:42.00), la británica Gemma Spofforth (100 m espalda, 58.12), el sudafricano Cameron Van der Burgh (50 m braza, 26.74) y Pellegrini (200 m libres, 1:53.67). Los dos primeros consiguieron además el oro.
El pulso más apasionante de la jornada fue sin duda el Biedermann-Phelps, donde el europeo demostró su gran momento de forma y su excelente progresión, dejando en evidencia la falta de preparación del estadounidense, que decepcionó en su primera final individual.
Con este crono, conseguido con un bañador Arena X-Glide, el alemán de 22 años asesta un duro golpe al 'rey de la natación', impidiéndole el título mundial y arrebatándole la plusmarca planetaria, que el estadounidense había conseguido en los Juegos Olímpicos de Pekín (1:42.96).
El “tiburón” fue cazado.
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