Isaac Lobo
ilobo@aldia.co.cr
La música positiva y el buen mensaje de las letras de Alpha Blondy se olvidaron la noche del viernes, en el salón Picachos, cuando hubo disturbios a raíz de la cancelación de su concierto.
Unos 700 asistentes que llegaron a Cartago agarraron a patadas la boletería y quebraron algunos vidrios del local.
Supuestamente, el organizador, el estadounidense Christopher Diforte, le quedó debiendo dinero a varias personas. Se trató de localizar a Diforte, pero no respondió los mensajes.
“A mí me tenía que cancelar $6 mil (¢3,4 millones) antes del recital y no lo hizo”, explicó Eladio Camacho, dueño de la empresa Más Música, encargada de poner el sonido.
“Le di tiempo hasta las 9:30 p.m. porque me dijo que no había podido cambiar un cheque, lo llevé a mi oficina que queda en Cartago para que usara sus tarjetas de crédito y todas rebotaron. Así que decidí desmontar mi equipo e irme”, explicó.
Horas antes, había ocurrido algo similar con la empresa de Seguridad ISASECA.
“Los miembros de la seguridad privada llegaron y al no cancelarle lo pautado decidieron irse”, contó Camacho.
Esta versión la confirmó José Cañas, vocero de la organización. “Efectivamente no había dinero para cancelarle a nadie”.
“Los asistentes somos los únicos afectados, ha sido una de las peores experiencias que hemos vivido en estos eventos musicales”, comentó Pablo Mora, quien era parte del público.
© 2009. Periódico Al Día. El contenido de aldia.cr no puede ser reproducido, transmitido ni distribuido total o parcialmente sin la autorización previa y por escrito del Periódico Al Día. Si usted necesita mayor información o brindar recomendaciones, escriba a webmaster@aldia.co.cr.