MSc. Margarita Murillo Gamboa
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¿Y qué sucede entre los 35 y los 50 años?

Lo que más me gusta destacar de esta edad sexual, es que, si son observadores, notarán que, casualmente en esta etapa es esperable que las personas tengan hijos adolescentes. Si leyeron el artículo donde mencionábamos las características de la adolescencia, en ella los hombres iban a mostrar mayor expresión por medio de los genitales y las mujeres por sus cambios emocionales.

Vuelvo a retomar esto porque precisamente, lo más importante de mencionar, es que si a esta edad se es madre de un adolescente, se cuenta con buenas referencias de madurez genital, para orientar y educar los acercamientos genitales de los jóvenes.

Si tuviéramos mayor educación, madurez y tranquilidad, sin lugar a dudas podríamos percibir con mayor claridad esa fuerza que proviene de los genitales, como una respuesta a la necesidad de vínculo, unido a la urgencia de educar y complementar con la vitalidad del autocontrol y el despertar del placer de manera ordenada y apasionada. No desbordada ni violenta.

Por otro lado, dada la madurez, las mujeres tendrán una mejor respuesta sexual y podrán desarrollar mejor su capacidad orgásmica.

También hay que considerar una mejor sensibilidad genital logrando buenos acercamientos coitales. La mujer a esa edad, podrá percibir un aumento de la pasión.