Carlos Láscarez S.
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Pavas - Los dos sospechosos de haber asesinado a una empleada del casino White House, en Escazú, fueron llevados ayer bajo estrictas medidas de seguridad a una audiencia preliminar en el Juzgado Penal de Pavas.

Se trata de dos hombres de apellidos Mora y Mena, a quienes se les sigue causa por el delito de homicidio calificado en perjuicio de Yerlin Marín Salazar. También se les atribuyen dos tentativas de homicidio calificado, dos violaciones calificadas, privación de libertad y robo agravado en perjuicio de dos mujeres de apellidos Marín y Peraza.

Mientras se llevó a cabo la diligencia, los agentes del OIJ y Fuerza Pública regularon el paso de vehículos por el sector, así como la presencia de personas ajenas a la zona.

Ya es la segunda ocasión que los hombres van al juzgado.

La semana anterior les dictaron tres meses más de prisión preventiva, que vence el próximo 30 de julio.

Vía telefónica, Carlos Marín, padre de dos de las víctimas, aseguró que es muy peligroso e irresponsable tratar de liberar a los sospechosos, ya que hay pruebas y personas en contra. “Le estoy dando una oportunidad a la ley para que cumpla. Lucharé por defender a mi familia y el honor de mi hija”, afirmó Marín.

La captura de ambos hombres, vecinos de Pavas, ocurrió el 31 de octubre del 2008, luego de que Mora llegó a firmar a San José por un caso de robo agravado, mientras que Mena, cayó en una casa en Lomas del Río, donde se ocultaba.