Ronny Soto, corresponsal GN
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Puntarenas. Sólo les bastó cuarenta y cinco minutos para aplastar al equipo casa.

Una verdadera película de horror para el cuadro dirigido por Jorge ‘Culaca’ González, cuyo actor principal fue el debutante portero uruguayo, Pablo Fuentes.

El Barrio México fue inteligente. Desde los primeros minutos del partido se dio cuenta la debilidad que ayer mostró el cuadro chuchequero en su marco y en su defensa.

Ese detalle le sirvió para que los de la barriada se fueran al frente y en solo la mitad del encuentro se llevaran para su casa tres puntos, gracias al 2-5 que se selló en la gramilla del estadio Miguel Lito Pérez.

Dentro de los goles mexicanistas, destacó el triplete del zurdo Maikol Ortiz, anotando al 9’, 15’ -golazo de tiro libre- y al 38’; para ser la primera vez en su carrera en marcar tres tantos.

En la segunda parte el barco estaba más que hundido, la comparsa silenciada y el eufórico público porteño empezaba a exaltarse.

Eso sí, la historia no terminó ahí. Con roja directa por discutir con el central, el arquero uruguayo salía de la cancha tras el reproche de una afición por las cinco anotaciones recibidas en su debut y por su actuación, que dejó mucho que desear.

Un Puntarenas irreconocible en su ‘Olla’ que quedó congelada.