Mario Guevara, colaborador
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Goicoechea.- Una sala de juicios repleta de periodistas, durante el Día del Niño sirvió ayer como marco para la sentencia a 10 años de cárcel de Mario Mendoza Bermúdez por dos delitos de abusos deshonestos en contra de su hijastra de seis años.

Los hechos juzgados ocurrieron el 27 de julio del año anterior en la casa de la madre de la menor en un precario en Curridabat.

El juez Esteban Amador en la explicación del fallo, dijo que el acusado no estaba viviendo con su compañera, él se aprovechó de su condición de padrastro de la niña para ingresar por la fuerza a la casa y realizar actos deshonestos por la fuerza a la menor, mientras la madre realizaba unas compras en un pulpería cercana.

“Cuando la madre regresó a la casa encontró al hombre sobre la niña, por lo que lo agredió con un sartén”, dijo Amador.

Cabizbajo, Mendoza escuchó el fallo de los jueces. Meses antes había sido capturado en una visita a Costa Rica después de estar en fuga en Nicaragua.

La fiscal Andrea Víquez, solicitó 12 años de prisión basada en la pena máxima que establece el Código Penal para estos crímenes. Los jueces no lo consideraron necesario porque el sentenciado no es reincidente en estos delitos.