Policías de Tránsito vestidos de civiles en transporte público o en vehículos oficiales que no son patrullas...
Esas son parte de las sorpresas que traerá ese cuerpo policial durante la Semana Santa.
Así lo confirmó César Quirós, director general de Tránsito, en una conferencia de prensa que tuvo lugar en medio de un reten al inicio de la autopista General Cañas, en La Sabana.
Según explicó, la iniciativa pretende tomar por sorpresa a los conductores y tratar de disminuir la posibilidad de avisos entre los vehículos.
“Es una irresponsable costumbre. El hecho de avisar la presencia policial colabora para que algunos imprudentes conduzcan ebrios o a exceso de velocidad”, adujo Quirós.
Ante el tema del uso de carros que no son patrullas, los oficiales en carretera trabajarán con el uniforme y las credenciales.
Los vehículos pueden ser de cualquier institución del Estado con la respectiva placa.
“Son vehículos que nos están proporcionando otras instituciones para ejercer una vigilancia y un control discreto. La principal lucha es combatir la imprudencia”, dijo Quirós.
Las diferentes vías del país serán tomadas por 900 oficiales de tránsito. Las ciudades serán vigilados por 259 agentes y 641 en las principales rutas nacionales.
El Ministerio de Obras Públicas y Transportes fijó como su principal meta reducir las seis muertes del año anterior.
