Martes 12 de julio de 2011, San José, Costa Rica

Fueron 10 años de magia

El último hechizo

Isaac Lobo

ilobo@aldia.co.cr

La emoción de los seguidores de Harry Potter en todo el mundo se revolverá con la nostalgia, en una pócima mágica que hace sumamente atractivo el final de la saga del hechicero adolescente.

“Harry Potter y las Reliquias de la Muerte: Parte 2” se estrenará este jueves a la medianoche con la batalla final entre Potter y su archienemigo Lord Voldemort.

La fecha crucial se acerca. Cuando cumpla 17 años, Harry perderá el encantamiento protector que lo mantiene a salvo.

El anunciado enfrentamiento a muerte es inminente y la casi imposible misión de encontrar y destruir los restantes Horrocruxies más urgente que nunca.

Ha llegado la hora final, el momento de tomar las decisiones más difíciles. Harry debe abandonar la calidez y seguridad de la madriguera para seguir sin miedo ni vacilaciones el inexorable sendero trazado para él.

Consciente de lo mucho que está en juego, sólo dentro de sí mismo encontrará la fuerza necesaria que lo impulse en la vertiginosa carrera para enfrentarse con su destino.

Espera mundial

Hace 11 años, Daniel Radcliffe (Harry), Emma Watson (Hermione) y Rupert Grint (Ron) tuvieron una fuerte carga en sus espaldas: convertir en carne y huesos los personajes de papel de creados por la gran imaginación J.K. Rowling y vaya que lo han hecho muy bien.

Aunque Watson y Grint han tenido una vida intachable, hace poco Radcliffe reveló algo que sus fans no sabían: era alcohólico.

Según Univisión.com el actor de 22 años dijo que empezó a abusar de la bebida mientras trabajaba en “Harry Potter y el Príncipe Mestizo” cuando contaba con 18 años. El portal reproduce sus declaraciones: “Me volví muy dependiente del alcohol para poder disfrutar de las cosas. Hubo unos pocos años en los que estaba enamorado de la idea de vivir como una de esas personas famosas pero en realidad, eso no es para mí”, confesó.

Radcliffe contó a la edición británica de la revista “GQ” que dejó el alcohol en agosto del año pasado. “Por más que me gustaría ser una de esas personas que van a una fiesta y se toman un par de copas y disfrutan de la fiesta, eso no va conmigo”.

Fue tanto el cariño que los actores le tomaron a la saga que Watson en una escena final rompió en llanto. “Y lloré, lloré, lloré y lloré, fue muy emotivo”, manifestó en el programa de televisión británico “Daybreak”.

El cariño no solo se dio en el set, se traslado al mundo a veces algo extremo. Tom Felton quin encarna al maligno Draco Malfoy recibió en una ocasión una petición en la que se le pedía que dejara a sus padres en Inglaterra para comenzar una nueva vida con un hombre desconocido en Estados Unidos.

Según contó el propio Felton: “Un estadounidense trató una vez de adoptarme. Es la carta más incómoda que he recibido nunca. Iba en serio”.

“No era sólo una carta. Enviaba documentos oficiales que había rellenado por mí por lo que tenía solo que firmar, cambiar mi nombre por el de Draco, divorciarme de mis padres e irme a vivir con él”.