Londres/ EFE.- Rebekah Brooks, la mujer de confianza del magnate de prensa Rupert Murdoch, se convirtió ayer en la última víctima del escándalo de las escuchas telefónicas ilegales del desaparecido dominical sensacionalista “News of the World”.
Brooks era consejera delegada de News International, rama británica del imperio periodístico de Murdoch, News Corporation.
La periodista, de 43 años, fue directora del News of World entre 2000 y 2003 y la primera mujer al mando del periódico The Sun (2003-2009). En los tres años que estuvo al frente del primero, ese diario realizó escuchas ilegales para obtener información exclusiva de políticos, famosos, deportistas, familiares de víctimas de crímenes y soldados fallecidos.
En el 2006 se desvelaron las escuchas pero la semana pasada la trama alcanzó nuevas proporciones al conocerse el caso de la niña asesinada Milly Dowler, cuyo celular intervinieron después de desaparecer, en el 2002.
Muy astuta
Brooks era una de las periodistas más influyentes del mundo de la comunicación, gracias a una mezcla infalible de ambición, encanto y habilidad para codearse con el poder.
La voracidad por conseguir exclusivas, la llevó a usar métodos poco ortodoxos, como colocar micrófonos en una habitación de hotel que ocupaba James Hewitt, para demostrar que tenía una relación con la princesa Diana.
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