Leonel Sancho acudió ayer a una cita en el hospital Escalante Pradilla, en Pérez Zeledón, para una prueba de esfuerzo cardíaco. Para su sorpresa, le reprogramaron la consulta por causa de la huelga de los trabajadores de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS).
“Ahora debo venir hasta octubre y el trámite lo realicé hace seis meses. Para llegar a tiempo, tuvimos que dormir en Pérez Zeledón, con todos los gastos que esto ocasiona”, dijo el usuario, quien reside en San Vito, Coto Brus.
Al igual que este paciente, miles de asegurados fueron ayer los grandes perdedores de la discordia que mantienen funcionarios y jerarcas de la institución.
Pese a que los centros médicos brindaron como mínimo los servicios de emergencias, el paro causó lentitud en las consultas, largas filas, reprogramación de citas, aumento de listas de espera y dificultades para retirar medicinas. (Ver recuadro: Impacto)
El hospital Calderón Guardia tuvo problemas para sacar 5 mil kilos de ropa lavada debido a impedimentos de los huelguistas.
Además, algunos de los grupos manifestantes causaron bloqueos en la autopista General Cañas, la avenida segunda de San José y los alrededores del hospital Calderón Guardia.
Sin acuerdo
El porcentaje de trabajadores en paro es solo una más de las discrepancias entre sindicalistas y los altos mandos de la CCSS.
Mientras la Unión Nacional de Empleados de la Caja (Undeca) calificó como exitoso el movimiento, con un apoyo del 80 por ciento, la presidenta de la entidad, Ileana Balmaceda, reportó la ausencia del 10 por ciento durante la mañana y del 6% en la tarde.
La jerarca espera que para hoy muchos de los manifestantes se reintegren a sus puestos.
“Es una huelga sin sentido, inoportuna. Es una huelga que no tiene ni pies ni cabeza”, aseveró Balmaceda.
Además, aseguró que mantiene disposición para dialogar con los gremios, pero que no negociará la eliminación de subsidios por incapacidades porque un pronunciamiento de la Procuraduría de la República se lo impide.
Por ello, Undeca convocó ayer a huelga nacional para mañana, a las 10 a.m., en la avenida segunda. “Hacemos un llamado para que el pueblo se vuelque masivamente en defensa de la Caja”, exclamó el presidente de esta agrupación.
Los trabajadores también reclaman el pago de la deuda que tiene el estado con la Caja.
Colaboraron: Amy Ross, Freddy Parrales y Mario Cordero.
Impacto
Afectación a pacientes
La Caja suspendió casi 30 mil citas y 400 cirugías. Unas 5.300 placas se dejaron de realizar y se retuvieron 161 mil medicamentos. Los servicios de consulta externa, a los que acuden 45 mil personas diarias, estuvieron mermados.
Medidas de contingencia
En caso de que el paro se extienda varios días, toda la ropa hospitalaria se lavó el fin de semana. Además, se contrataron dos lavanderías privadas que cobran un dólar por kilogramo.
Sanciones a funcionarios
Los centros médicos levantaron ayer listas de los ausentes para hacer los rebajos salariales si la huelga se declara ilegal. Las autoridades no quieren incurrir en despidos.
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