Por un día, 37 niños dejaron sus casas en malas condiciones para adentrarse en un castillo de sueños, donde experimentaron la magia de encarnar a piratas y exploradores de bosques.
Los pequeños de la fundación Casa de los Niños, de Tirrases, Curridabat, disfrutaron –para muchos por primera vez – de las salas del Museo de los Niños. Por un día se olvidaron de las penurias económicas
La actividad fue promovida por la Fundación Monge, que cada setiembre organiza momentos de recreación para niños de escasos recursos económicos, provenientes de alguna comunidad previamente escogida.
Jéssica Mora, docente, mencionó que algunos de los pequeños viven en extrema pobreza.
“ Muchos vienen de precarios. Con las actividades de la Casa de Niños, más este tipo de ayudas, como la de la Fundación Monge, se espera romper el círculo de la brecha social”, puntualizó esta educadora.
Llenos de alegría y adrenalina
Cada pasillo de la antigua Penitenciaria Central de San José se llenó con las carcajadas y los gritos de emoción de los pequeños, que reflejaban en su rostro la satisfacción de compartir con sus amigos en un lugar lleno de fantasía e ilusión.
Shary Dalai, una de las niñas invitadas, mencionó que era la primera vez que visitaba el museo y que le gustó todo lo que había visto durante el recorrido.
“Me gusta mucho poder ver los animales. Prefiero ver las culebras y las ranas rojas y verdes que a las tortugas”, dijo Kevin Chaves, un niño participante.
