Su talento y carisma la hicieron ganarse uno de los apodos que solo un selecto grupo de actrices poseen en el mundo de la música y la televisión: “La Novia de América”.
Y es que tras 30 años de trayectoria artística se ha posicionado como una de las estrellas más importantes dentro de la farándula y parece que la edad no es inconveniente para ella que a los 42 años sigue robándose los papeles estelares en los “culebrones” de Televisa.
Fue hace precisamente 30 años cuando debutó en las telenovelas siendo una chiquilla de 13 que lucía dos trenzas en su papel como “Chispita”.
Tras ser la niña dulce a la que todos apodaban “Lucerito” y luego de superar un divorcio bastante mediático, se convirtió en una de las mujeres más guapas.
“Sería absurdo que me quisiera quitar la edad porque todos saben mi vida, cuando empecé mi carrera, si tuve novio, cuando me casé, cuando me separé, cuando nacieron mis hijos. Disfruto de la mejor manera mi edad y mi experiencia y sin duda me siento una mujer plena, comprometida”, aseguró en una entrevista difundida por eonline.com
Lo que es cierto es que cuando no está preparando un material discográfico está grabando en los sets. Su último trabajo es en “Por ella soy Eva” donde actúa junto a Jaime Camil.
La ex esposa de Mijares y madre de José Manuel y Lucerito, aseguró que está fascinada con su nuevo personaje..
Ella espera que este personaje sea involvidable para el público, como lo fueron los que hizo en “Chispita”, “Cuando Llega el Amor”, “Lazos de Amor”, y “Mañana es para siempre”, entre otros.
Precisamente este último marcó un reto que no enfrentaba desde su triple participación en “Lazos de amor” (lo cual ha definido como el reto más difícil de su carrera actoral), pues no solo fue su regreso tras dos años sin actuar, si no que ocupó el rol de villana como Bárbara Greco.
Al año siguiente (2010) protagonizó “Soy tu dueña” otro de sus papeles protagónicos recientes en donde trabajó junto a Fernando Colunga y además compuso el tema principal de la telenovela.