Alejandro Arley Vargas
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El histórico edificio de la antigua Botica Solera, ubicado en barrio México, se convertirá el próximo año en una biblioteca pública y casa de la cultura.

Los herederos del inmueble se pusieron de acuerdo y ayer, en un acto oficial, donaron sus derechos a la Municipalidad de San José para que asuma la restauración.

Johnny Araya, alcalde capitalino, explicó que faltan trámites legales para que el edificio se registre como municipal.

“Son 24 traspasos. Más de la mitad ya manifestaron la voluntad de firmar. Lo que va a quedar pendiente son cuatro o cinco mortuales (proceso en ausencia del testamento de un fallecido)”, indicó Araya.

El alcalde Araya aseguró que para inscribir el edificio a nombre de la Municipalidad se necesitan todos los traspasos, pero con solo tener la mayoría ya puede administrar el inmueble.

La fecha de inicio de obras aún no está definida.

Según el Ministerio de Cultura, la construcción de la botica corresponde a la década de 1930.

Fue declarada patrimonio histórico y arquitectónico de Costa Rica el 1.° de diciembre de 1999.

Los propietarios tienen una deuda de ¢8 millones por impuestos atrasados. Araya aseguró que por la donación, el ayuntamiento asumiría el pago.

Contentos

Emilia Acuña Solera, una de las herederas que cedió su derecho, contó que está muy satisfecha con el proyecto de convertir el edificio en una biblioteca.

“Mi abuelo, Manuel Solera y mi abuela Juanita Valverde (dueños originales de la botica), estarían muy contentos con esto”, comentó Acuña de 78 años.