Alejandro Arley Vargas
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En tiempo récord, los tribunales de justicia de San José sentencian y hasta pueden enviar a la cárcel a los delincuentes que sean sorprendidos cometiendo el delito o escapándose.

Cinco personas acusadas de robo simple y hurto agravado, en los últimos 15 días, ya fueron sentenciadas por el Tribunal Penal de Flagrancias que comenzó sus funciones el 1.° de octubre.

Bajo esta modalidad, delitos que se producen a diario en la capital –como cadenazos, asaltos o robos de celulares– serían sancionados casi de inmediato.

El martes sentenciaron a un año de cárcel a un hombre de apellidos Chaves González, a quien la Policía sorprendió cuando robaba el celular de una joven el pasado 6 de octubre.

El miércoles condenaron a ocho meses de prisión a tres hombres y a una mujer por hurtar una máquina de medición de gases en el un centro de servicios en San Antonio de Coronado .

A todos los sentenciados se les concedió el beneficios de ejecución condicional de la pena, por lo que no irán a prisión. Sin embargo, si cometen un nuevo delito, pararán tras las rejas.

¿Cómo lo hacen?

David Hernández, juez coordinador del Tribunal de Flagrancias, explicó el procedimiento que se sigue contra los sospechosos.

Tras ser detenidos por policías o civiles, los presentan ante un fiscal, quien toma el caso.

“Se entrevista al ofendido, los testigos y al imputado si declara y se revisan las pruebas. Todo se hace de forma oral, grabado en video y audio”, dijo Hernández.

Luego, se realiza una “audiencia temprana”, de carácter informal, con un juez penal. En esta etapa puede haber conciliación.

De no hallarse una salida alterna, el mismo día se fija una audiencia preliminar, donde el fiscal acusa y el juez define si el asunto se eleva a juicio o no.

Si los imputados no cuentan con antecedentes y el delito tiene una pena menor a los tres años de cárcel, se opta por una conciliación o por libertad del infractor bajo prueba de conducta.

De persistir la negativa a la conciliación y si los imputados aceptan, el caso se resolvería en un proceso abreviado, como ocurrió con los ladrones de la máquina en Coronado.

En última instancia, el juez es quien señala el juicio en un plazo de cinco días.