Amado Hidalgo
Periodista

Tragando su orgullo y prepotencia, la prensa mexicana dejó en evidencia sus miedos de cara a la hexagonal.

El gigante verde fanfarroneó después de tres victorias en México, pero cuando le tocó salir dejó su pedigrí.

Con 13 jugadores en las principales ligas europeas, la crítica mexicana no perdona el pobre papel de su fútbol, con los altibajos de los jugadores referentes, como Salcido y Márquez.

Lo que llamaron “la generación de oro”, tras el Mundial Sub 17 ganado, ahora recibe todo tipo de cuestionamientos. Los estandartes de aquel equipo (Vela y Giovanni) no logran consolidarse.

Hasta el portero Oswaldo Sánchez ha sido bajado del pedestal. La prensa aboga por el juvenil Ochoa, al tiempo que enfila baterías contra el técnico europeo Eriksson.

El paseo que vaticinaban en la hexagonall, se volvió una pesadilla. Acosados por la hegemonía de Estados Unidos, su verdugo desde hace ya mucho tiempo, no ocultan sus miedos para cuando tengan que venir a Centroamérica o visitar a su “papá del norte”, la pobre región futbolística a la que han querido renunciar desde hace ya tiempo, por considerarla poco competitiva.

Los ratoncitos verdes están enchilados. Y aunque le restan méritos a Costa Rica por el grupo que ganó, ya no están seguros de que la hexagonal siguiente sea el paseo que hace poco soñaban.