Rodolfo Martín
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Gina Medina, conocida ama de casa de la Ciudad Colonial, dejó ayer la cama con el canto del gallo para conseguir el mejor campo en la barrera y ser testigo, en primera fila, de la histórica revancha de “El Malacrianza” y “El Chirriche”.
“Espanté las cobijas a las 4:30 de la mañana. Tenía que ser la primera”, comentó, con tono jocoso, alrededor de las 9 a.m., bajo un ardiente sol, un fuerte viento y una polvareda que se le metía por los ojos, boca y hasta por los poros.
Luego, comenzaron a llegar sus hermanas, Dalia y Enid, y varios sobrinos, así como su amiga del alma Flory Zúñiga Baltodano, quien refrescaba la garganta con un “águila madrugona”.
“Ya nos volamos el desayuno. Nos quedan el almuerzo y la comida que están en los peroles, allá abajo, porque de aquí nos vamos hasta las once de la noche. El campo se cuida, lo defendemos como el toro se defenderá esta tarde”, comento Enid.
Ella, para la presentación de “El Malacrianza” y “El Chirriche”, el 4 de enero en Zapote, hizo fila desde las 5 p.m. para ser la primera en comprar las entradas y estar así, como ayer, en el mejor lugar.
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