Ya ha pasado un más de un mes desde el inicio del año, por lo que es un buen momento para monitorear sus metas y propósitos, una buena práctica para que cuando llegue diciembre no vengan los remordimientos de no haber hecho nada.
Así, ¿cómo va su dieta?, ¿cómo va el ejercicio?, ¿el ahorro?, etc. Pero quizás, una de las metas más importantes, ¿cómo van sus hábitos de manejo?
¿Conduce con mayor tranquilidad?, ¿respeta las señales de tránsito?, ¿evita meterse entre los carros o manejar por las aceras?... Ojalá que todas las respuestas anteriores sean positivas.
Si bien la Nueva Ley de Tránsito ya está poniendo en alerta a más de un conductor, la actitud personal es esencial en las calles para manejar responsablemente.
En la sección de Motorizados de Al Día se ha insistido en diferentes oportunidades sobre la importancia de este tema.
Así que unos aspectos de seguridad que vale la pena resaltar para la conducción en la ciudad son los siguientes:
• Respete al máximo las señales de tránsito las cuales están diseñadas precisamente, para evitar peligros potenciales.
• Anticípese a los movimientos de los vehículos y peatones que tenga a su alrededor, para reaccionar antes de que las cosas sucedan.
• Monitoree de manera constante el tráfico de su entorno para detectar esas pequeñas señales que le permitan anticipar situaciones potencialmente peligrosas.
• Con respecto a los conductores de carros que de forma lamentable no respetan su espacio, muchas veces es mejor dejar la agresividad a un lado, cederles el paso y no librar una batalla.
• Resulta muy importante llevar preferiblemente las luces encendidas durante el día, usar de manera adecuada las direccionales, para avisar sus maniobras a los otros vehículos y mantener en perfecto estado la luz de freno.
• Recuerde que los espejos retrovisores son esenciales.
• En las intersecciones, respete los altos y aunque lleve la vía no haga el cruce hasta no estar seguro de que otros autos no cruzarán en su trayecto.
• Prefiera no transitar entre los vehículos, no se confíe. Al dejar su carril, siempre tendrá todas las de perder en caso de que algo suceda.
• Evite conducir en algún estado de estrés, como por ejemplo estar apurado porque se le hizo tarde, con rabia por algún problema que tuvo o con agresividad por un problema con otro conductor. Ello hace que se piensen menos las acciones y por lo tanto, se está más propenso a cometer un error fácilmente.
• Ni que decir de vigilar la velocidad, no conducir bajo los efectos del licor o cansado y evitar maniobras peligrosas, especialmente en sitios oscuros y en horas pico.
¡Ya lo sabe! por su seguridad y la de los demás, y no solo por evitar una infracción, monitoree constantemente sus actitudes en carretera. ¡Buen viaje!
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