Mañana celebraremos un aniversario más de la Batalla de Rivas, un hecho fundamental en la historia de nuestro país.
Conmemoraremos también, de manera especial, la figura de Juan Santamaría, Héroe de la Patria gracias a su valor para incendiar el mesón en que se atrincheraba el ejército filibustero que quería apoderarse de nuestro país.
Mucho se ha dicho acerca de Juan Santamaría... que si existió o no...
Hasta se habla de si realmente murió en la famosa Batalla de Rivas, que si falleció más bien a consecuencia del cólera, que si fue un invento de los políticos liberales para borrar de la historia a Juan Rafael Mora…
En fin, la tradición oral y varios documentos históricos sustentan la existencia de Juan Santamaría y su acto heroico.
Y la verdad es que, en este momento, eso pasa a segundo plano.
Porque lo realmente importante es el espíritu de libertad de nuestro pueblo.
Por esto, este 11 de abril, no debemos olvidar a esos costarricenses que supieron defender nuestra libertad. Ese grupo de “Juanes Santamarías” anónimos que, aunque no figuran como protagonistas de esta historia, ofrendaron su vida heroicamente defendiendo esos ideales tan arraigados desde entonces en nuestro ser costarricense.
Debemos recordar también a los hermanos centroamericanos que lucharon hombro a hombro con nosotros y, muy especialmente, debemos recordar a la figura de Juan Rafael Mora Porras, nuestro valiente presidente y guía en la Campaña Nacional de 1856 y 1857.
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