Buenos Aires / EFE y AFP. El seleccionador de fútbol de Colombia, Hernán Darío Gómez, aceptó que el triunfo por 1-0 sobre la Selección de Costa Rica ayer “fue un inicio muy duro” del certamen y admitió que “en este partido me temblaban las piernas”.

Afirmó tras la victoria ante Costa Rica (1-0) que a su equipo le faltó “chispa”.

Gómez había afirmado que si no se clasificaba en este grupo iba a dejar la selección, pero hoy señaló que vista la igualdad y el potencial de los equipos del grupo, cambió de opinión, lo que no le impidió reconocer que en el partido de hoy (ayer) “dirigió bien al equipo en el primer periodo, pero mal en el segundo”.

“Es difícil ganar en un debut de la Copa América y más ante un rival que es el mejor equipo de Centroamérica y que tiene en su banquillo a un viejo “zorro” como La Volpe, que ordena bien a sus equipos y reduce los espacios”.

Se mostró conforme con que su equipo mantuviera el balón en el tramo final del encuentro a pesar de jugar con un hombre más y por liderar el grupo.

“Ayer (anteayer) Bolivia le complicó el encuentro a Argentina cuando hace tiempo el partido se habría resuelto por goleada. Colombia y Costa Rica están cada vez más parejos. Argentina y Colombia tenían la obligación de ganar, pero no fue fácil” , dijo.

“Si hoy no hubiéramos ganado, en Colombia se monta un lío, pero si se ve el potencial del rival, se puede comprobar que no es sencillo ganar, aunque algunos no lo vean así”, explicó.

“Participé en ocho Copas y hoy me temblaban las piernas porque hay responsabilidades que pesan mucho y hoy nos pesaron. Faltaron alegrías y orden”, agregó.

Preguntado por el próximo partido con Argentina, señaló que la parte positiva es que ya tiene tres puntos, pero que Argentina es el favorito.

“Ellos tuvieron un partido muy duro ante Bolivia y van a recomponerse”, indicó.

Alabó las virtudes de Costa Rica como un equipo con mucho orden, ante el que fueron humildes. “Ahora ya no hay sorpresas”, concluyó el técnico.