Ante estas variables, cuando su bolsillo está más reducido de la cuenta o simplemente no puede estirar más su dinero para la comida, haga un último esfuerzo aún así para comer sanamente.
El objetivo es muy claro: contar con comidas rápidas y saludables, pero a un bajo costo, según lo recomienda la página de Internet, www.kingcounty.gov.
Hacer una lista previa a la compra del supermercado o la feria es el eje principal que lo ayudará a evitar poner en el carrito lo que no necesita.
“Lo que no deben faltar son los granos, pastas, frutas y vegetales, incluir menos carne y más frijoles es una solución viable, aunque nunca llega a sustituirla en su totalidad, al menos se debe consumir carne dos o tres veces a la semana”, comentó la experta en nutrición Mariela Morales.
Hay que tomar en cuenta, sin excesos, los alimentos que están en oferta, que es cuando generalmente se encuentran en temporada y por lo tanto son más frescos.
“Todo alimento tiene su sustituto, siempre es importante escoger uno de cada grupo alimenticio”, agregó Morales.
El no apegarse a marcas, leer etiquetas, así como evitar hacer las compras cuando se tiene hambre, son aspectos que podrán mejorar su decisión de compra y así escoger mejor sus alimentos.
Hay que recordar que una alimentación saludable le ayudará junto al ejercicio a bajar de peso. Además, surtir su despensa o refrigerador de productos básicos le beneficiará a mantener un orden en cuanto a las comidas.
Lo básico
No deben faltar.
Algunos alimentos esenciales para su familia podrían ser: leche, huevos, pan, tortillas de harina, frijoles, vegetales, arroz, pastas y fideos, papas, cebollas y frutas.
No olvide el sabor.
Las especias, hierbas y condimentos, como la salsa de soya pueden hacer que alimentos simples tomen un sabor muy especial.
