Los descuentos que trajo consigo el Viernes Negro acapararon ayer la atención de muchos consumidores, quienes abarrotaron tiendas como Play y Universal.
Desde temprano, los clientes hicieron fila en las afueras de Play, Zapote, donde los descuentos llegaban hasta un 50%.
Las pantallas fueron los artículos más atractivos. Leonor Picón decidió este año invertir los excedentes que le otorgaron en su trabajo para comprar un televisor de 42”. También compró una pantalla para su hija.
“En el Viernes Negro las ventas aumentan hasta un 300%, pero en los días previos la venta baja un poquito porque la gente comienza a llamar para ver qué ofertas vamos a tener”, aseguró el administrador del local, Guillermo Cordero.
En la Universal de avenida central, San José, los pasillos también lucían repletos de clientes.
Ahí muchos padres y abuelos decidieron comprar regalos para los pequeños de la casa.
Por ejemplo, Nuria Hernández aprovechó los descuentos para comprar el obsequio navideño de su nieta. Este fue su primer Viernes Negro de compras.
En Cemaco de Zapote el ambiente estuvo menos agitado. La cadena de tiendas ofreció rebajas fijas y otras que variaban cada dos horas.
“No encontré ofertas como las que realmente caracterizan al Black Friday, porque se supone que son de un 50% para arriba y no de un 15% o 20%, que son las que se hacen en cualquier momento”, señaló Lucy Castillo, cliente de Cemaco.
