El sacerdote, Walter Howell Castro, quien impulsó diversas obras sociales en Escazú y otras zonas del país, apareció sin vida la madrugada de ayer en su casa, ubicada en la urbanización La Amada en San Pablo de Heredia.
Su deceso fue confirmado por el Organismo de Investigación Judicial (OIJ), la Fuerza Pública y el padre Glen Gómez, jefe de comunicaciones de la Arquidiócesis de San José.
Howell, de 64 años, fue encontrado sin vida, a las 5:15 a.m., por una persona que lo cuidaba y cuya identidad no trascendió.
Sobre las circunstancias en las que falleció, trascendió que se registró en su habitación. Su deceso se produjo de manera accidental.
Desde su ordenación el 7 de diciembre de 1974, el cura, conocido por su barba y su buen humor, prestó servicios en Concepción de Naranjo, Hatillo, Tierra Blanca de Cartago y Escazú, donde será sepultado a la 1 p.m. de hoy.
