La mayoría de las personas que ven a Giorgio Bongiovanni se quedan asombradas por las heridas que tiene él en manos, pies y algunas veces en su frente.
Bongiovanni, de origen italiano es un místico aparentemente estigmatizado, quien en América se ha hecho muy popular por sus mensajes de paz y por tener una fundación que vela por niños pobres.
Muchos han dudado de su autenticidad, pues él asegura que supuestamente tiene contacto mental con extraterrestres.
Amplias entrevistas se han difundido en la televisión. Incluso fue invitado en el 2007 al programa “Otro Rollo”, de Adal Ramones. Allí el italiano, que habla prefecto español y apadrinado por Jaime Maussán, estudioso del fenómeno ovni contó su historia.
“El 2 de setiembre de 1989 fui a Fátima, al lugar donde apareció la Virgen. Ella se me aparece y me pregunta si estaba dispuesto a soportar parte del sufrimiento de su hijo y le dije que sí”, manifestó en el programa mexicano.
Desde ese entonces es cuando se le hacen estigmas en sus manos y pies, aseguró que luego de esto la Virgen le pudo “difundir el tercer secreto de Fátima ocultado por la Iglesia y revelar la verdad sobre los extraterrestres”.
Según Wordpress.com Giorgio empieza a viajar a España, Argentina, Uruguay y Paraguay.
“En Uruguay tienen cientos de seguidores y han fundado la Asociación cultural Un Punto en el Infinito”, relata la página.
Su principal promotor, amigo y seguidor es el periodista J. George Almendras, quien escribió la vida y obra del estigmatizado en su libro “¿Humanidad a dónde vas?” en 1993.
Afirma que recibe mensajes cósmicos de seres extraterrestres que vigilan la evolución de la humanidad desde sus inicios.
El portal Catholic.net duda de su credibilidad y lo pone de manifiesto. “Afirma ser la reencarnación de uno de los niños videntes de Fátima, (Francisco, 1917) y a su vez de Elías y de Juan el Bautista”, apunta el sitio.
Anuncia que grandes catástrofes sobrevendrán y anunció el fin del mundo para agosto de 1991, luego en 1993 y en 1996. Ahora dice que será para el 31 de diciembre del 2012 y el retorno de Cristo en un platillo volador.
Además..
Caballito
Según planetacurioso.com una nueva marca ingresó en el Libro de Récord Guinness ya que en el New Hampshire, Estados Unidos, nació un potrillo que mide 35 centímetros y pesa apenas 2,7 kilogramos. Einstein, como se llama, es el caballo más pequeño del mundo.
Broma pesada
Filo, un polaco de 24 años, recibió una de las bromas más pesadas del mundo. Cuando él despertó, en su casa, en Lubczyna, se dio cuenta de que su carro estaba desaparecido, más tarde lo encontró en la parte superior de una árbol de sauce.
Abuela voladora
Una mujer de 104 años de edad rompió un récord Guinness por ser la mujer más anciana del mundo en lanzarse en el parapente. “He disfrutado cada minuto”, declaró Peggy al diario “Sunday Express”. “Me gustaría hacerlo de nuevo, especialmente si alguien bate mi récord“, puntualizó.