Nueve días han pasado desde la última vez que escuchó la voz de la que para ella es una de sus razones de vivir, su nieta.
Virginia González confesó ayer que le pide a Dios morirse ahora al sentir que no soporta el dolor de no saber dónde está su nieta, Valeria Castro, de 13 años.
La menor, quien es vecina de San Blas de Moravia, permanece desaparecida desde el martes 22 de mayo cuando al parecer salió hacia un supermercado cercano.
“Desde que ella nació vive conmigo. Siempre que salía me decía a que hora iba a venir y si se atrasaba me llamaba, pero ese día no regresó ”, afirmó González.
Al día siguiente, los familiares de Valeria interpusieron la denuncia ante el Organismo de Investigación Judicial, la cual fue aceptada hasta el sábado, día que inició la labor de búsqueda.
Gónzalez mencionó que han recibido llamadas en las que les aseguran decir donde está la menor, pero que son falsas.
Recibió amenazas
Según Fabián Bustamante, tío de la desaparecida, un día antes de su desaparición, la joven le contó que recibió una llamada de un número privado donde le decían que se cuidara porque le iban a hacer algo a ella y a su mamá.
Si la ve llame al 2245- 6827.
