Tilarán. - Un hombre que huyó sin pagar dos botellas de licor y que horas después regresó para amenazar con un arma de fuego a los dueños de la licorería, falleció antenoche tras recibir dos disparos por parte del hijo del dueño.
El hecho ocurrió antenoche a las 7:10 p.m. fuera de la licorería El Higuerón en Parcelas de Quebrada Azul de Tilarán, confirmaron ayer la Fuerza Pública y el OIJ.
El fallecido fue identificado como Greivin Jesús Calderón Elizondo, de 26 años, quien según familiares había llegado el sábado a la comunidad con la intención de visitar a su mamá. Era casado y vecino de Esparza, Puntarenas.
Enoc Canales, oficial de la Fuerza Pública de Tilarán, aseguró que la víctima presentaba dos balazos, uno cerca del pecho y otro a un lado de la boca.
Los disparos fueron percutidos con una carabina calibre 22.
El cuerpo del hombre cayó a 50 metros del negocio. Pese a que la Cruz Roja llegó rápido, a su arribo ya no tenía signos vitales.
Mario Jiménez, propietario del negocio, aseguró que el sospechoso se llevó dos botellas sin pagar, por lo que al llegar de nuevo en la noche le preguntaron si iba a pagar, momento en que los encañonó a ambos.
“No vengo a pagarles, más bien vengo a matarlos, fue lo que dijo el hombre cuando ingresó”, recordó asombrado Jiménez.
Allegados de Calderón expresaron su enojo ante lo acontencido, ya que para ellos nadie tiene la potestad para matar a otro.
“Estaba en Guatuso cuando me avisaron que a Greivin lo habían matado. Es muy duro porque solo Dios puede quitar la vida”, comentó su tía Ana María Elizondo. El cuerpo lo levantaron a las 11:40 p.m.