Nacionales
Jueves 13 de septiembre de 2012, Costa Rica

Vientos dejaron a 150 mil norteños sin servicio eléctrico

San Carlos se recupera de destrucción por ráfagas

Carlos Hernández, corresponsal GN y Hugo Solano

hsolano@aldia.co.cr

Unos 150 mil habitantes de San Carlos, Río Cuarto de Grecia, Alajuela y Sarapiquí de Heredia estuvieron sin servicio eléctrico entre 10 y 26 horas a consecuencia de los fuertes vientos que el martes dañaron postes y líneas de la red eléctrica.

Así lo informó Álvaro Chaverri, director de relaciones corporativas de la Cooperativa de Electrificación de San Carlos (Coopelesca).

Confirmó la caída de 16 postes de cemento y madera, por lo que 17 cuadrillas laboraban intensamente desde el mediodía de ayer para sustituirlos.

En Santa Clara de Florencia, La Tigra y Concepción, a las 11 a.m. de ayer, habían líneas eléctricas sobre vías asfaltadas y caminos de lastre.

“De los 13 distritos de San Carlos, únicamente Ciudad Quesada y La Fortuna no reportaron averías”, dijo Chaverri.

En San José de La Tigra, San Carlos, sus habitantes no tuvieron agua potable entre el martes al mediodía y las 2 p.m. de ayer, ya que hubo rupturas en la red de tubería

Jenny Chacón, vice alcaldesa municipal, dijo que a través del sistema 911 se reportaron 102 averías, en su mayoría, en el servicio eléctrico.

Hay daños en viviendas, caminos, instalaciones comunales y educativas así como en carreteras y caminos vecinales.

Chacón confirmó que aunque esa labor apenas comienza tienen reportes de 20 casas afectadas, muchas de ellas parcialmente.

En Florencia, una familia debió reubicarse en otra comunidad, pues su vivienda quedó inservible, muy destruida.

Ráfagas destructoras

La posición anormal de un sistema de alta presión en el Caribe trastocó el tiempo desde el lunes y se espera que los fuertes vientos continúen hoy.

Según Gabriela Chinchilla, del Instituto Meteorológico Nacional (IMN), lo percibido por vecinos como tornados, en San Carlos el martes y en Limón el lunes, se trató de otro fenómeno.

“Se trata de ráfagas descendentes. Consisten en una nube de tormenta grande, llamada cumulonimbo, la cual genera ráfagas que van desde la nube, a unos 15 kilómetros, y llegan a la superficie con velocidades de hasta 100 kilómetros por hora”, explicó.

“Esas ráfagas no generan succión y se desarrollan en pocos minutos. Provienen de nubes grandes, que a veces producen rayerías y granizos. Es difícil determinar cuándo van a surgir ráfagas como las que azotaron el sur de Limón y San Carlos”, dijo Chinchilla, quien los calificó como eventos extremos y anormales.

Para ella es una anomalía que en setiembre surjan vientos alisios como los de esta semana, los cuales generaron núcleos nubosos que cambiaron el patrón climático en todo el país.

Hubo alisios acelerados, lluvias en el Caribe y no llovió en el Pacífico. Las condiciones frescas han sido más parecidas al tiempo de fin y principio de año.