Él es parte de los componentes del fenómeno Percance, la banda que sigue fortaleciéndose cada vez más en el país y que está a muy poco de pasar fronteras con su rock fusión.
Así como es su música, cargada de energía, así de agotadores son los días de Esteban Ramírez, quien se divide entre los negocios familiares y sus amigos de La Fortuna de San Carlos. De ahí es originario y donde guarda sus más memorables recuerdos.
“Cuando era pequeño yo jugaba fútbol y mi papá –falleció recientemente– una vez me dijo que cuando tenía la bola era el rey del mundo, eso me marcó de por vida y metafóricamente lo tengo presente en todo lo que hago”, mencionó el también compositor.
Por cierto ya escribió algunas letras en honor a su padre.
El vocalista junto a su madre Nidia Hidalgo, tienen a cargo la administración de dos restaurantes en la zona, donde se encarga desde ir a la feria, hasta velar por arreglos y remodelaciones, como ya lo hace con uno de ellos, en el que le incluyó un escenario para presentaciones musicales.
Al consultarle sobre si existe la preocupación del futuro y dejar de lado su pasión, Esteban lo tiene claro.
“Es bien difícil por cuestiones de tiempo, queda tratar de organizarse lo mejor posible, no es fácil, pero es un paso que tengo que dar en mi vida y ver así otro ingreso económico”.
Sin embargo la música es la prioridad del estudiante de Arquitectura y Administración.
“Ahora me toca ver la vida desde un ángulo diferente y no desde el que quisiera”.
El músico se define como el hombre de la casa y por eso debe dedicarle tiempo a los negocios que su padre fundó.
Su otro “yo”
Así como es amante del rock, también lo es de la naturaleza y es que cómo no hacerlo si vive en las faldas del coloso volcán Arenal.
No esconde que es agotador transportarse a menudo del Valle Central a la Zona Norte del país debido a conciertos y ensayos, pero se da sus escapaditas con amigos.
Además “cada vez que puedo saco el rato para sentarme, ir al río, el volcán y apreciar lo increíble que es poder estar en esta tierra”.
A volar alto
Su expectativa con Percance es grande, luego de desatar la locura en el país, tienen en mente despegar y llevar sus éxitos a tierras lejanas, para eso ya tienen acordado opciones para Centroamérica y el próximo año estarán en Colombia por dos meses.
“Estamos viviendo el mejor momento del grupo, tenemos un año de estar de gira nacional, hemos ahorrado bastante y no queríamos dar ese paso de salir sin que aquí sepan quiénes somos y ya es hora”, apuntó el integrante de la banda ganadora de Los Premios Los 40 Principales (2008).
En esencia
Sin mucha preocupación por su apariencia, no le disgusta si le piden una foto o un autógrafo.
La sencillez de Esteban lo caracteriza y aunque en escenario se convierte y muestra su parte extrovertida.
Con el tema del corazón, dice estar bien así como está.
“No es que sea exigente, es que no me gusta quedar mal y la verdad ando bastante ocupado, no me he puesto a buscar alguien que trate de entenderme y prefiero quedarme tranquilo, no quiero complicarme”.
Alérgico a los camarones, evita molestar para que no lo molesten, de mala memoria, le gusta dormir mucho, compartir con la familia, ver películas y salir de vez en cuando con amigos, son parte de los detalles que vive a diario el cantante Esteban Ramírez.
