No ha transcurrido ni un mes desde su entrada en vigencia y ya la Ley General de Control de Tabaco enfrenta su primera acción de inconstitucionalidad.
Un vecino de Heredia, quien presentó la acción el martes anterior, impugnó tres artículos (4, 22 y 29) de la normativa, pues considera que no especifica un lugar donde las personas que fuman puedan hacerlo “imponiendo restricciones desproporcionadas”.
La nueva legislación prohíbe fumar en centros de trabajo, bares, restaurantes, cafeterías, parques, paradas de bus o taxi, centros educativos, medios de transportes, entre otros lugares más.
La oficina de prensa de la Sala IV informó ayer que la acción está en estudio de admisibilidad.
El 28 de marzo pasado, tan solo dos días después de que la ley fuera publicada en el diario oficial La Gaceta , un hombre de apellido Ugalde y quien indicó ser fumador desde hace 26 años interpuso un recurso de amparo y alegó también no tener dónde fumar.
El recurso fue rechazado el 10 de abril anterior.
Más rechazos
La llamada Ley Antitabaco recibirá una objeción más, pues la Cámara Costarricense de Restaurantes y Afines (Cacore) presentará una acción de inconstitucionalidad en unas dos semanas.
“La ley es ambigua, coarta la libertad de comercio, prohíbe un producto que es legal y trata la propiedad privada como si fuera un sitio público”, manifestó Manuel Burgos, presidente de ese grupo que integran 400 afiliados.
