Vivir Hoy
Martes 31 de julio de 2012, Costa Rica

Corazón partío

Dilema moral

Karina Picado

Psicopedagoga

karinavidasana@gmail.com

Con mi esposo me sentía muy sola. Conocí un muchacho también casado y tuvimos una relación que duró 1 año y hasta llegué a pensar en irme a vivir con él, pero no lo hice. Aún así, no he dejado de amarlo, sueño con él y ni siquiera quiero estar con mi esposo, pues me maltrata psicológicamente. ¿Qué hago?

Existe un refrán popular que dice que: “nadie puede ser feliz a expensas de otra persona” y mi experiencia profesional y personal me dicen que es cierto. Creo que no hay felicidad a medias. Cuando se debe tomar una decisión tan difícil no sólo se puede pensar en uno mismo, sino en quienes dependen de nosotros. Específicamente en su caso, usted no puede acarrear con el peso de haber pensado en el proceso de la destrucción de un matrimonio (el de su examante). Podría ser que él se divorcie de ella por otros asuntos, pero usted no tendría ahí una responsabilidad directa. Ni usted ni nadie merecen vivir bajo la violencia que experimenta con su esposo oficial y eso debe terminar. Podría decidir darle un plazo para que él se ponga en tratamiento médico y psicológico contra la agresividad y ver resultados. Lame al 2229-9205.