Hoy tienen otra citra, en el Morera Soto, a las 5:30 p.m. por Canal 6

Franklin Arroyo González

farroyo@aldia.co.cr

No es un partido más. Es el juego que saca del anonimato a un jugador, o hunde a otro.

El que logra que un equipo se concentre, el que vuelve mudo a los técnicos, el que la afición espera con ansias.

Alajuelense y Saprissa se aprestan para un clásico más, hoy a partir de las 5:30 p.m. y aunque ninguno llega en su mejor momento, la pasión que despierta el juego lo hace especial.

“Todo se centra en ese encuentro, el jugador que no se motive en un clásico no tiene cuando, no se necesitan psicólogos ni motivadores, solo que lo tiren a uno al ruedo”, expresa Wilmer López, ex alajuelense.

Alejandro Sequeira, ex delantero del Saprissa, dice que no importa quien llegue mejor a este tipo de encuentros.

“Es lo mejor que a uno le puede pasar, es parecido a un juego de la Selección en una eliminatoria, es el mismo marco de atención, hay garantía de estadio lleno, es una fiesta”, comentó.

MI MEJOR CLÁSICO

“Una final inolvidable para mí”

Wilmer López, ex manudo

“Recuerdo los dos juegos de la final de la Concacaf del 2004. Imagínese, era final de un torneo internacional ante el archirrival de toda la vida.

El primer partido lo jugamos en Heredia, en el Rosabal Cordero, Saprissa fue casa y empatamos a un gol. La “S” estaba remodelando su estadio, por eso jugó en Heredia.

Fue una final bonita y agradable, uno no la olvida, yo metí el gol. Fue una jugada bien hecha del equipo, una penetración por el centro, un compañero me ubicó y simplemente rematé y por dicha fue el gol.

Saprissa empató después con anotación de Alonso el “Mariachi” Solís.

La vuelta, en casa, la ganamos 4 a 0 y yo metí el cuarto gol.

Había muchas cosas que rodeaban ese partido, un ambiente muy bonito y ya había anotado en el primer juego, por lo que tenía mucha motivación. El gol fue una descolgada de Arnáez, quien centró al segundo palo y venía cerrando solo. Le di de cabeza al palo cambiado. Fue la culminación de un gran torneo”.

“Tenían montada la fiesta”

Alejandro Sequeira, ex morado

“Mi mejor clásico fue aquella final de Clausura del 97-98, no solo porque anoté, sino porque ganamos la serie, fuimos a la final y...campeones. En sí, en el partido tuvimos que arriesgar, si empatábamos quedábamos fuera.

Íbamos 0 a 1, con gol mío y nos expulsaron dos hombres (Centeno y José Pablo Fonseca) y fue cuando se dio una escapada de Gerald Drummond para el 0 a 2. Fue intenso, la afición no nos acompañó tanto, los manudos ya tenían preparado el campeonato, pero al conseguir la final, la afición se volcó con nosotros.

Los dos goles fueron parecidos, pases profundos y anotamos ante Álvaro Mesén, yo me levé a Luis Marín y definí entre los pies de él. Había mucho triunfalismo en ellos, pero nosotros fuimos a jugar al ataque, como nos dijo Alexandre Guimaraes, que era el entrenador en ese entonces.

Salí de cambio y me fui a la banca a esperar el cierre, que fue de infarto. El primer juego lo perdimos en Tibás 0 a 1, con gol de Rodinei Martins (brasileño)”.

EL QUE MEJOR RECUERDO

Dos de cinco goles

Javier Rojas, Actualidad

“Recuerdo dos clásicos extraordinarios. Un triunfo de Saprissa, 5 a 1, en el estadio Nacional, con tres goles de Carlos Vivó Gobán. Ese día, el arquero alajuelense, Carlos Alvarado, en un arrebato de cólera, ante una jugada fea de Vivó, le lanzó un golpe, pero el saprissista se capeó el tiro y Alvarado tumbó a su compañero Erick Molina.

Carlos se retiró del partido, no jugó más, no fue expulsado, simplemente no jugó más. A él le metieron dos goles y su sustituto Julio “Patadita” Quesada recibió los tres restantes.

El otro fue un 5 a 2 para Alajuela, también en el Nacional, con Errol Daniels en su máximo apogeo. Ese día metió tres goles. En ese torneo, la Liga le hizo cinco tantos a todos sus rivales. Fue campeón, en un gran partido”.

La semana de un penal

Everardo Herrera, Canal 7

“Recuerdo, no con tanto detalle, uno que se suspendió justo cuando se iba a lanzar un penalti, y quedó pendiente. El penal fue reprogramado para lanzarse una semana después, sin la presencia de público y los medios de comunicación se enfocaron toda una semana en ese disparo de penal.

Incluso, en épocas en que las transmisiones televisivas no eran tan frecuentes, ese día se pasó en directo el lanzamiento de penal (el juego fue el 7 de octubre del 79 y el penal se tiró el 20 de octubre. Rodolfo Mills anotó a Nery De Souza: 2 - 2”.

El primero de “Badú”

Kristian Mora, Columbia

“Del que más tengo memoria es del primer clásico de Valdeir “Badú” Vieira, porque fue un gran juego. Saprissa ganaba 2 a 0, en Alajuela y terminó ganando la Liga 3 a 2. A partir de allí se marcó una época de amor entre “Badú” y la afición. Fue un debut muy emocionante y hubo un muy buen gol del uruguayo Washinton Hernández, que hizo la jugada del “tonto” a Mauricio Wright y venció a Lonis”.