Dallas / AFP. - Con la serie por el título de la temporada 2010-2011 de la NBA empatada a un juego por bando, los Mavericks de Dallas quieren probarle a sus detractores de qué madera están hechos en esta temporada, y buscarán demostrarlo hoy en el tercer partido ante el Heat de Miami.
Luego de perder el martes el primer partido de la serie al mejor de siete por 92-84, los Mavs tuvieron una remontada increíble de 15 puntos, para vencer el jueves en un emotivo segundo encuentro en Miami.
El equipo del técnico Rick Carlisle buscará seguir montado en la ola de esa hazaña para coronarse ante su público, por primera vez en su historia como franquicia, y darle una alegría de campeonato a su asombrosamente transformado dueño Mark Cuban.
Dallas y Miami chocarán de vuelta hoy, en el tercer tope de la serie, y luego el martes y jueves.
Los Mavericks quisieran devolverle al Heat la roñosa historia de 2006, cuando luego de ganar los dos primeros partidos de la final cayeron barridos en los cuatro siguientes. El último de ellos, y para más humillación, en su propia cancha de Dallas.
“Es una historia que se quedó inconclusa”, afirmó Dirk Nowitzki, el héroe que permitió a Dallas darle la vuelta al partido del jueves anterior.
El “Kaiser” texano anotó en ese tope los últimos 9 puntos de Dallas, y la canasta ganadora en una bandeja con la mano izquierda que tiene lesionada.
Empero, el canastero mayor de Dallas, advierte a sus compañeros no subestimar a su rival.