Pablo Calvo, de 23 años y vecino de San Cristóbal, sobrevivió de milagro a una caída al vacío cuando al Nissan que conducía se le acabó el pavimento.
El accidente fue el martes en Casamata, Interamericana sur. Calvo recuerda que unos carros le hicieron cambio de luces.
Su novia, Susana Segura, de 22 años, también sobrevivió. Ambos llevaban el cinturón de seguridad. Eso los salvó en la caída de más de 10 metros.
En medio del lodo, el chofer quebró una ventana y unos vecinos le lanzaron una cuerda con la que ambos pudieron salir.
Él recorre unos 100 kilómetros todos los días para llegar a su trabajo en las bodegas de la empresa Costafros, en Belén, Heredia y antenoche había recogido a su novia de unas clases que recibe en la UAM en Cartago.
El accidente fue después de las 8 p.m. y ayer hacía trámites en el INS de Cartago. Su novia recibió varias puntadas en la cabeza y a él le hicieron varias radiografías.
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