Buenos Aires / AFP / 4:40 p.m.- Miles de hinchas de River Plate estallaron en festejos para celebrar "el fin de la pesadilla" que significó estar un año en la Primera B Nacional (segunda división) y se movilizaron el sábado hasta el Obelisco de Buenos Aires, clásico epicentro de alegrías deportivas.
Los colores rojiblancos llenaron primero las calles del barrio de Núñez, en el norte de la capital argentina, donde se disputó el partido clave en el estadio Monumental, en el que River venció 2-0 a Almirante Brown en la última fecha del torneo que le marca el retorno a la primera división.
Gorros, pelucas, camperas y todo cotillón con los colores del club sirvieron para expresar el desahogo del regreso primera, un año después de haber sufrido la pérdida de la máxima categoría del club más ganador de títulos locales (33), por primera vez en sus 111 años de historia.
"Sufrimos hasta el partido de hoy pero pusimos a River en el lugar que tiene que estar", sintetizó el DT Matías Almeyda, quien rompió en llanto emocionado en el pitazo final y se abrazó con su colaborador Gabriel Amato.
"Hoy se termina este momento tan difícil que hemos vivido los hinchas de River", agregó el entrenador al expresar "el agradecimiento al hincha, que estuvo en todos los estadios, que tuvo paciencia".
Almeyda, para quien los hinchas no ahorraron críticas a lo largo de las 38 fechas de torneo, fue llevado a hombros en el campo de juego, mientras los jugadores lucían una camiseta con la leyenda "23-J, La Resurrección".
En tanto, el presidente de River, Daniel Passarella, "celebró" el triunfo y dijo haber "despertado de una pesadilla".